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Juan Tamariz es un artista único. Conocido en su España natal, es uno de los artistas más singulares y talentosos que jamás han honrado nuestro arte. Siguiendo la tradición de Vernon y Slydini, ha forjado su propio camino mágico. Sus libros de magia son lectura obligatoria para cualquier estudiante de magia con espíritu de estudio. Su repertorio es vasto y legendario; en una ocasión actuó durante 74 semanas seguidas en televisión. Es muy solicitado y a menudo es acosado en las calles de Madrid por sus admiradores. Es uno de esos artistas especiales que transporta al espectador a un viaje maravilloso: un viaje mágico a través del corazón y la mente.
Juan es un artista consumado. Armado solo con una baraja de cartas, puede entretener a un grupo pequeño o a un auditorio lleno durante horas. Es divertidísimo, pero al mismo tiempo te engañará como nunca antes. Es uno de los grandes pensadores de la magia, un maestro de la distracción y una filosofía mágica, y nunca había tenido una gran cantidad de material grabado... ¡hasta ahora!
Efectos incluidos:
El Cochecito: ¡Tal como lo interpretó Juan en el especial de televisión de magia más grande del mundo! Este es el verdadero trabajo de magia y emoción: transporta al público a la infancia, capturando su imaginación y asombro mediante el uso de un simple coche de juguete. ¡Este es un excelente ejemplo de cómo convertir un simple objeto en una obra maestra mágica!
€5,00 EUR
Impuestos incluidos.
Juan es un artista consumado. Armado solo con una baraja de cartas, puede entretener a un grupo pequeño o a un auditorio lleno durante horas. Es divertidísimo, pero al mismo tiempo te engañará como nunca antes. Es uno de los grandes pensadores de la magia, un maestro de la distracción y una filosofía mágica, y nunca había tenido una gran cantidad de material grabado... ¡hasta ahora!
Efectos incluidos:
El Cochecito: ¡Tal como lo interpretó Juan en el especial de televisión de magia más grande del mundo! Este es el verdadero trabajo de magia y emoción: transporta al público a la infancia, capturando su imaginación y asombro mediante el uso de un simple coche de juguete. ¡Este es un excelente ejemplo de cómo convertir un simple objeto en una obra maestra mágica!